¿Cómo definir el cliente ideal de tu landing page?

Saber dirigirse al público correcto es una de las bases sobre las que se construye el marketing. Encontrar al cliente ideal de landing, al destinatario perfecto de email o al comprador óptimo del producto será el principio más importante para tu marca.

A la hora de diseñar el perfil del cliente ideal de landing el camino para realizarlo variará dependiendo de la marca. Por esto, te vamos a dar detalles de cómo diseñar y definir tu cliente ideal de landing para obtener el máximo rendimiento de tus usuarios en la landing page.

¿Qué es el buyer persona?

El buyer persona es el término por el que se conoce al cliente ideal de un sitio web o cliente ideal de landing. Es una representación ficticia del consumidor final. Se construye mediante la información demográfica, sus motivaciones, las necesidades y el comportamiento que muestra.

El objetivo de diseñar un buyer persona es la de conocer cómo se comporta el cliente, qué busca, qué necesidades demuestra y qué hacer para cumplir esas necesidades. Se trata de una manera de ponerse en los zapatos del comprador final. La compañía necesitará poder saber realmente la forma de actuar del cliente para adaptar su estrategia a él.

Así, una landing page que conozca su cliente ideal será una página de aterrizaje mejor preparada para el comprador final. Podrá adaptar su mensaje a las necesidades específicas del cliente. Su llamada a la acción será más potente. La elección de los campos en el formulario más adecuado al cliente final.

El buyer persona es la manera que tiene un sitio web o landing page de dirigir su producto al cliente y no esperar que al cliente le guste el producto. Se trabaja con un prototipo, con un cliente ideal para el que se prepara todo.

Cambia el enfoque de la marca hacia el cliente. La empresa se enfoca directamente al cliente, optimizando su forma de trabajar y conociendo mejor al cliente ideal de landing.

¿Por qué es importante definir a tu cliente ideal?

Cada cliente es un mundo. Cada empresa tiene sus clientes ideales. No hay dos clientes iguales, y no todas las empresas que trabajan en el mismo sector se dirigen al mismo cliente. En un mundo tan variado, saber quién es el cliente ideal es crucial.

El cliente ideal te ayudará a responder a preguntas y cuestiones relacionadas con el usuario/consumidor final de tu producto. Saber esto optimizará tu forma de actuar, mejorará tus landing pages y tu sitio web. Repercute en una mejora continuada de tu producto y tu forma de actuar.

Emprender un proceso de definición de tu cliente ideal te permitirá dar respuesta a una serie de incógnitas. Dichas incógnitas son los datos y la información que definirán el perfil del cliente final:

• Sexo
• Edad
• Profesión o área de trabajo
• Nivel de educación
• Lugar de residencia
• Nivel adquisitivo
• Aficiones y hobbies
• Redes sociales que emplea
• Intereses y preocupaciones
• Aspiraciones

Mediante estos datos, y otros, podrás conocer mejor a tu cliente. El conocimiento sobre el cliente te dará ventaja para poder actuar. Dejarás de depender de lo que los clientes soliciten en el momento, para poder adelantarte a sus peticiones y ofrecérselo antes incluso de que lo demanden.

Estar un paso por delante, conocer bien al comprador final y ofrecerle aquello que espera recibir es una forma ideal de adelantarte y estar siempre a la vanguardia en el sector. Saber el cliente ideal de landing te ayudará a poder realizar este paso y garantizar tu éxito.

Define tu cliente ideal, ¿qué pasos seguir?

Definir a tu buyer persona o tu cliente ideal de landing es relativamente sencillo. Como ya hemos explicado en el apartado sobre la importancia de definir a este tipo de cliente, se trata de dar respuesta a una serie de preguntas que te ayudarán a conocer mejor al cliente.

Definir a tu cliente ideal implica convertirte en un sociólogo, una persona que se encarga de analizar la sociedad, sus comportamientos, sus patrones y sus usos y costumbres.

Tu objetivo es atraer a tu landing page a ese cliente ideal que has definido. Para ello debes enfocarte en él y extraer toda la información posible. Sigue éstos pasos y podrás definir a tu cliente ideal para tu marca:

1. Obtén toda la información demográfica posible: sexo, edad, lugar de procedencia, idioma… Los datos que determinarán la base para poder establecer diferentes segmentos de población.
2. Actividad profesional, trabajo y nivel adquisitivo. Hay ciertos productos que interesan más a un grupo de población muy concreto. Otros productos no son accesibles dependiendo del nivel adquisitivo de la gente. Es imprescindible saber en qué nivel socioeconómico se mueven tus clientes.
3. Usos y costumbres. Los hábitos a la hora de trabajar, de interactuar con tu sitio web o tus landings, etc. Saber la forma de moverse y de aproximarse a ti que tiene el potencial cliente es la mejor forma de adaptar tu estrategia a estas necesidades.
4. Necesidades e intereses. Los clientes tienen ciertas necesidades que debes tratar de cubrir. La importancia de encontrar dichos intereses y necesidades y ser capaz de darles respuesta es la mejor forma de dirigirte a ellos y decir que eres el que pone solución a sus cuestiones.

Con estos datos estarás elaborando un retrato robot del cliente bastante aproximado a la realidad. Su conocimiento te facilitará poder dirigirte al cliente, elaborar contenido especialmente dedicado a él y así obtener más y mejores opciones de negocio.

Errores a la hora de diseñar el cliente ideal de landing page

El proceso de creación de los clientes ideales tiene sus posibles errores también. Algunos de los fallos son bastante comunes. Éstos son algunos de los errores más cometidos a la hora de diseñar el cliente ideal:

1. Partir de supuestos iniciales: A la hora de diseñar el cliente ideal suele ser habitual que partamos de una creencia previa que nos dice cómo será ese cliente. Cada empresa suele elaborar su imagen posible del cliente que tendrá. En ocasiones esta imagen se idealiza y trata después de apoderarse de los datos obtenidos. Confía en tu trabajo de obtención de información y no confíes en las ideas preconcebidas con las que has comenzado.
2. Crear segmentos demasiado amplios: El objetivo de un segmento de público es que sea lo más acotado posible. De nada sirve si un segmento da cabida a todos los clientes. Debes ser más específico y desarrollar tantos segmentos y clientes ideales como tengas.
3. No tener en mente los datos a obtener: Otro error de bulto a la hora de diseñar el cliente ideal tiene que ver con el enfoque dado al proceso. Si no hay un enfoque centrado realmente en la obtención de los datos más importantes, y se centra en datos e información supérflua, el proceso redundará en errores difíciles de solucionar. Estarás obteniendo datos que de poco te servirán.

¿Puedes cambiar de cliente ideal con el tiempo? ¿Debes vender solo a tu tipo de cliente ideal?

Sí y no. El cliente ideal de tu sitio web o landing page puede ir variando con el tiempo. Esto se determinará en base al producto que pongas en venta, el tipo de comunicación que practiques, los medios que emplees y el tono que elijas.

Lo habitual es que el cliente ideal varíe poco, aunque siempre es necesario ir ajustando esto para que nuevos clientes entren en lugar de aquellos que se van marchando. Para poder garantizar esto algo tiene que cambiar en tu sitio web o landing page para dar cobijo a los nuevos clientes.

Ofrecer periódicamente nuevas experiencias a tus clientes ideales de landing, pero también resultar atractivo para tus próximos clientes ideales es la base de tu estrategia. Ser  interesante ahora y de cara al futuro. Por este mismo motivo, tu estrategia no debe centrarse únicamente en los clientes ideales de landing, sino que tiene que estar abierto a la entrada de nuevos tipos de clientes.

Las redes sociales se pensaron para públicos muy concretos. Así, Facebook estaba diseñado para estudiantes universitarios, Twitter para el mundo empresarial o Snapchat para los más jóvenes. Cada red social tenía un cliente ideal y un enfoque particular. El tiempo ha demostrado que su flexibilidad a la hora de aceptar nuevos clientes y nuevas formas de uso de su servicio ha sido su gran garantía de éxito. Han sabido adaptar su estructura y forma de actuar para que todo tipo de clientes encuentren interesante su oferta.

Muchas empresas han entendido este tipo de enfoque y tratan de crear experiencias similares a las redes sociales. Todos los clientes que lo deseen tienen en su mano la posibilidad de acercarse a la empresa, si bien puede que no estén dentro de ese grupo de población que la empresa ha delimitado como sus clientes ideales.

Si bien la flexibilidad es importante, también lo es centrarse en un único grupo de población. Tienes que tener claro quién es tu cliente ideal y dirigirte únicamente a él. Esto quiere decir que invertir esfuerzos en resultar atractivo para todos es inútil, ya que te llevará mucho tiempo y no siempre el resultado será positivo.

Define a tu tipo de cliente ideal, dirígete a él y crea tu landing page en base a tus datos sobre este tipo de cliente. Tu marca atraerá a este tipo de comprador “ideal”, pero también a otros. Aunque en todo estarás garantizando tu atractivo hacia el grupo de población que has marcado como ideal.

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