Cómo incluir videos y gifs en tus emails
Incluir vídeos y gifs en los emails es una demanda recurrente de algunas marcas. Fundamentalmente las que intentan explotar al máximo las capacidades audiovisuales. Pero no es algo sencillo de conseguir.
El email marketing sigue posicionándose como uno de los canales más importantes dentro del marketing digital. A lo largo de los años ha experimentado un desarrollo notable en cuanto a los formatos utilizados. En un principio, el protagonista era el texto. Que en ocasiones iba acompañado por alguna imagen.
En los últimos años y debido al avance de las técnicas audiovisuales así como de nuevas tecnologías, otros formatos han comenzado a aparecer en casi cualquier canal digital. El vídeo y los gifs son los protagonistas de esta historia. No obstante, estos dos formatos han experimentado muchos problemas a la hora de adaptarse al email.
En la actualidad, no parece que las cosas hayan cambiado. Sigue habiendo problemas a la hora de incluir vídeos y gifs en los emails. Algunos gestores de correo no aceptan vídeos y otros hacen un amago de reproducirse en el propio canal, pero la realidad es otra.
A pesar de todas estas complejidades, existen métodos que ayudan a incluir vídeos y gifs en los emails. Presta atención para que puedas adoptarlo en tu próxima campaña de email marketing.
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Cómo puedes incluir vídeos y gifs en los emails
El engagement que provoca un vídeo no lo logran otros formatos. Por eso, el vídeo se ha convertido en uno de los formatos más utilizados en muchas campañas de marketing digitales. Existen muchos factores por los que ocurre esto. Uno de ellos es la facilidad de ver un vídeo y la rapidez con la que puedes visualizarlo.
Además, no cabe duda de que un vídeo impacta mucho más a la vista y al final engancha. Pero cuando se trata el tema del vídeo en el email las cosas cambian. Son muchos los problemas que ha experimentado este formato en este canal. Incluir vídeos y gifs en los emails no es sencillo ¿Quieres saber por qué?
Razones por las que el vídeo no acaba de funcionar en los emails
Esta tabla con todos los clientes de email existentes hasta día de hoy muestra algunas de las razones por las que incluir vídeos y gifs en los emails no suele ser una buena idea. Como ves, algunas parece que aceptan los vídeos en sus emails. Pero son las menos.
Todo esto tiene un por qué: La no compatibilidad con HTML5. Muchos de estos clientes no soportan este código de HTML con el resultado de que pierden la posibilidad de reproducir un vídeo de manera normal. Se constata que aquellos clientes que sí aceptan este código, han logrado más conversiones. Representan más de la mitad de lo que se comparte en el mercado.
Algunas aplicaciones de email como Apple Mail o Samsung email han permitido ya la reproducción de cualquier vídeo en sus canales. Mientras tanto Gmail y todos los dispositivos Android continuarán mostrando una imagen «falsa» que redirigirá al usuario a la landing page real. Y es en esa página dónde se reproducirá el vídeo.
La clave está en el lenguaje HTML5
El código HTML5 soporta los siguientes formatos de vídeo:
- MP4.
- OGG.
- WebM.
Apple, por ejemplo, decidió aceptar sólo el formato MP4 en emails y navegadores. Esto lo hizo debido a temas relacionados con la propiedad intelectual del formato. Teniendo en consideración los problemas que pueden causar el resto de formatos en los emails. Por eso, es recomendable que uses el formato MP4 si quieres que tus usuarios reproduzcan vídeos en los emails que envíes.
El problema es que la mayoría de los clientes no aceptan este código HTML5. Así, muchos de éstos gestores de correo han apostado por mostrar una imagen con el símbolo de reproducción: Una falsa imagen de vídeo, que te redirige a la landing page real donde poderlo reproducir.
La otra alternativa es el uso de los gifs animados convertidos de las imágenes del vídeo. Esta otra opción ha empezado a verse mucho debido a que es un formato aceptado por todos los clientes de email. El único con el que no es compatible es Microsoft Outlook.
Finalmente, existe un formato de previsualización aceptado por webmail, en el que se permite visualizar el vídeo en el propio email.
Métodos alternativos para la reproducción de vídeos en email
Existen 3 posibles métodos para intentar incluir vídeos y gifs en los emails y que funcionen. Son los siguientes:
1.- La falsa imagen que simula un vídeo
Como puedes observar, esta imagen simula perfectamente lo que sería un vídeo. Es una manera de engañar al usuario para que, así, la experiencia que tenga sea buena. Puedes hacerlo mediante el uso de un símbolo de play, como en la foto de arriba, incitando al usuario a hacer clic.
En el momento en el que el que el usuario le da al play es redirigido automáticamente a la página web en la que está alojado. Normalmente esos portales de vídeo son Youtube o Vimeo.
Si quieres que la reproducción de vídeo parezca aún más real, puedes añadir a ese icono del play la interfaz completa del reproductor de vídeo. El resultado es que dará aún más la sensación de que es un vídeo integrado en el contenido del email.
Este método es uno de los más utilizados por las empresas, ya que simula perfectamente a un vídeo. El usuario podrá disfrutar de la reproducción del vídeo y, además, incrementarás la tasa de clics, principal objetivo de cualquier empresa de marketing.
2.- Los gifs animados con imágenes del propio vídeo
Esta segunda alternativa también está funcionando bastante. La mayor ventaja es que casi todos los gestores permiten la visualización de gifs animados. Es clave, ya que las animaciones crean un engagement enorme en el usuario y simulan que muestran un vídeo, cuando en realidad es un simple gif animado del vídeo que está reproduciéndose.
Una vez que se reproduce, se abre la página en la que está alojado ese contenido. Es en ese sitio web dónde se reproducirá el vídeo.
En el caso de los clientes de correo que no acepten los gifs animados, al menos, mostrará el primer fotograma de la animación.
3.- La previsualización de los servicios de webmail
Esta es una de las opciones menos conocida pero que puede servirte de mucho. El servicio que te ofrece un webmail como Gmail, Yahoo Mail o Microsoft Live (antiguo Hotmail) es el de la previsualización.
Mediante una segmentación de la base de datos, podrás enviar correos personalizados con vídeos. Simplemente debes introducir el enlace o url del vídeo en el propio email. Será el propio usuario el que podrá reproducir el vídeo en el propio email evitando hacerlo en otra página, como ocurría anteriormente.
Las ventajas de este último método son varias:
- Logras que la experiencia de usuario mejore, ya que no tiene que salir del email para reproducir el vídeo.
- Igualmente, consigues incrementar la tasa de clics de tus campañas.
Pero, a pesar de estos beneficios, son muchos los gestores que todavía no han adoptado esta opción. El futuro será el que determine cuál es la mejor opción de vídeo para reproducir los emails. O si los gestores de emails adoptarán masivamente la opción del HTML5, y así no tener estos problemas.
¿Tiene sentido incluir vídeos y gifs en los emails?
Algunas marcas entienden que incluir vídeos y gifs en los emails siempre hace que destaquen frente a la competencia. No obstante, depende mucho de tu audiencia y de tu marca.
Los vídeos crean un engagement enorme en el usuario. Pero para causar esa atracción, debes tener en cuenta la velocidad de carga del vídeo y la rapidez a la hora de reproducir. Igualmente, si logras que el usuario reproduzca el contenido en el propio email, el resultado será un usuario más que satisfecho.
Por eso, es interesante que hagas una segmentación adecuada de los envíos. Crea un segmento con los usuarios que utilizan gestores de email marketing que soporten el código HTML5. Así al enviar el email a estos suscriptores podrán visualizar el contenido en el propio mensaje.
Por su parte, los gifs animados, por su parte, son el puro reflejo hacia donde va la sociedad del momento. Un ritmo de vida rápido en el que todo se ve en un instante. No cabe duda de que ha calado de forma notable en todos los usuarios. A pesar de lo atractivo que pueda llegar a ser un gif en un email, trata de no sobrecargarlo.
De la misma forma que utilizas un vídeo, audio, imagen o gráfico, que simplemente acompañan al contenido, el gif realiza la misma función. Además, cuenta con una gran ventaja: Su ligereza. El peso de un gif es tan pequeño que se pueden difundir en todos los canales digitales.
¿Quieres mejorar tus emails añadiendo los mejores gifs y vídeos a tus contenidos? Lo primero que debes hacer es identificar las aplicaciones que necesitas para conseguirlo. Además, una buena idea es optar por plataformas de email marketing profesionales como MDirector para crear tus campañas. ¡Regístrate ahora mismo y empieza a crear campañas de emailing rompedoras!